viernes, 24 de febrero de 2012

Aprender.

Decepción. Sentir que lo que hiciste no valió la pena. Abrir los ojos. Ver con claridad. Por primera vez. Y aprender. Aprender que no había nadie ahí. Que, al final, estabas sola. Que pusiste en juego tu felicidad por la de otro. Y perdiste. Que pensabas en plural, cuando debiste hacerlo en singular. Tal como hacían los demás. Aprender que cuando las cosas son de verdad, son fáciles. Y correspondidas. Aprender que, si hablamos de sueños, no está bien dejarlos en las manos de otro. Por si se pierden. Y no está el mundo como para perder sueños. Aprender a darte cuenta. Aprender que la vida se escapa. Que es corta. Y que lo que importa, es ser feliz.

"No te entretengas en tonterías, que las hay. Y vete a buscar lo que te haga feliz, que el tiempo corre muy deprisa". 


Aprender a las malas. Pero aprender de verdad.






miércoles, 8 de febrero de 2012

tic tac, tic tac

Pasa el tiempo. Tiempo, tiempo. La causa y a la vez la cura de todas las cosas. Maldito seas. Maltido 'tic', que me matas por dentro. Maldito 'tac' de falsas esperanzas. Y de dudas. De cuestionarse. De preguntarse qué narices has estado haciendo durante los últimos siete años de tu vida. De preguntarse si valió la pena. Y no querer escuchar la respuesta. Porque sabes que duele. Tiempo de frío. Siberiano, dicen. Y no sólo el de las calles. Que no hay tazas de leche caliente para el frío de corazón.